Microsoft Word - Cartilla EL EJERCICIO DEL MANDO 2025 25 nov

desplazó cerca de 250 metros hacia la costa, varándose atravesado en fondo de arena. No existe evidencia exacta, pero se presume que el Leucotón no fondeó cerca del punto recomendado en la carta, por lo que se estima que la unidad quedó muy cerca de costa. En poco tiempo, desde el inició de la maniobra, el buque se varó en la playa. Eran las 19:58horas.

Debido a lo anterior, la superioridad naval de Talcahuano, dispuso que el Cabrales, que se encontraba en la isla Mocha, zarpara de inmediato para auxiliar al Leucotón. Desde Puerto Montt se ordenó el zarpe del Galvarino y el Comandante en Jefe de la Armada ordenó el zarpe desde Valparaíso del Janequeo al mando del Capitán de Corbeta Sr. Marcelo Léniz, debiendo esta unidad recalar inicialmente en Talcahuano con el propósito de embarcar elementos de salvataje, personal y al Jefe de la Partida de rescate, Capitán de Fragata Sr. Claudio Hemmerdinger. Luego, el 3 de agosto en la tarde el Janequeo completó su preparación en Talcahuano y continuó al sur para cooperar, junto con los otros buques, en la maniobra de desvaramiento y a la brevedad. El Janequeo fondeó en la Bahía de San Pedro el 4 de agosto de 1965 con un tiempo variable y con vientos moderados del NW. Sin embargo, se podían realizar las maniobras de rescate. Una vez que los tres buques que iban a auxiliar al Leucotón recalaron a San Pedro, comenzó rápidamente la tarea, al mando del Comandante Hemmerdinger, quien junto con buzos de salvataje y con la ayuda del material de rescate embarcado, iniciaron de inmediato las evaluaciones preliminares. A consecuencia de continuos malos tiempos, la maniobra se hizo difícil no obteniéndose resultados positivos y, como pasaban los días y existía la necesidad de re encender faros en la zona de Puerto Montt, se despachó con esa misión al Galvarino, permaneciendo en la maniobra de desvaramiento, sólo el Cabrales y el Janequeo. El Leucotón, que se encontraba completamente varado en arena, no presentaba mayor peligro para la dotación del buque e incluso, parte de su personal pudo bajar a tierra armando una maniobra de aparejo, permitiendo el desembarco de personal de manera más segura. Se hace presente que entre los que pudieron dejar el Leucotón se encontraba el Marinero Maniobra Fuentealba quien al desembarcar del buque y colgando de un cable, se percató que otro tripulante estaba en peligro al caer al mar, no dudando en lanzarle al agua para rescatarlo. Rápidamente comenzaron las maniobras para reflotar el Leucotón, que no presentaba grandes averías.

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